Creo que esta semana va a ser muy parisina en este blog. Mi querido amigo Igor me preguntaba qué era eso de un -o una, no lo tengo muy claro- Raclette.
Según la Wikipedia, "el Raclette es un queso de origen suizo del cantón del Valais hecho a base de leche cruda de vaca y que normalmente se presenta en forma de gran rueda de unos 6 kg aproximadamente". "Es un queso sociable, pues la mayor parte del tiempo es consumido entre amigos alrededor de un aparato de raclette", añade la Wikipedia.
La verdad es que yo estaba algo confundido, pues pensaba que la raclette era el aparato -el que nos pusieron a nosotros era eléctrico- mediante el que se fundía el queso para después untarlo con fiambres y patatas cocidas -podéis ver uno en la foto-. Al parecer también se designa así al tipo de queso.
El aparato consistía en una especie de tubo con unas resistencias -no sé si esa es la palabra correcta- como las de una estufa que se calientan y que van derritiendo el queso que se encuentra debajo en una bandeja movible.
Nosotros lo probamos en un restaurante de fondues por el barrio de Grands Boulevards, que era donde teníamos el hotel. La verdad es que nos encantó, tanto por la novedad de tener que esperar a que se fundiera el queso como por lo rico que estaba.
19 nov 2007
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Letras antiguas
-
►
2009
(69)
- ► septiembre (1)
-
►
2008
(85)
- ► septiembre (3)
-
▼
2007
(96)
-
▼
noviembre
(28)
- La 'Prospe'
- De mudanza
- Kasparov y Karpov
- Lavapiés
- No sé qué escribir... os dejo una foto
- Mi primer cierre
- El amor callejero y desesperado en París
- Las quimeras de Notre-Dame
- Un amigo
- Raclette
- De vuelta...
- Nos vamos a París
- Toalla para 'fantasmas'
- El Mario de todas las galaxias
- Rufus Wainwright
- Breves apuntes
- Nadadora
- Las normas
- ...la encontró
- Todo vale para ligar...
- La Vía Láctea
- Help!
- Donkey Kong a tamaño gigante
- Prescience
- El portátil más antiguo
- Almohada para leer por las noches
- Tres minutos... caos
- Cinco minutos de escritura...
- ► septiembre (5)
-
▼
noviembre
(28)
Etiquetas
Arte
(3)
Astronomía
(5)
Blogs
(2)
cine
(14)
Colegas
(2)
Cómics
(15)
Consumo
(1)
Cuentos
(22)
Economía
(3)
Fotografía
(17)
Frikadas
(30)
Gastronomía
(1)
Internet
(13)
Juegos de mesa
(1)
Letras
(1)
Leyendas
(3)
literatura
(36)
Madrid
(2)
medios
(7)
Mitología
(2)
Música
(62)
Palabras
(4)
periodismo
(9)
Poesía
(2)
Política
(3)
Teatro
(2)
Viajes
(21)
Vida
(73)
Videojuegos
(8)
Wii
(2)
3 comentarios:
Muchas gracias por la explicación, Paco.
Ya me quedo mucho más tranquilo, jeje
:- P
Dicen que una imagen vale más que mil palabras, pero en este caso creo que ni eso, habría que catarlo en directo
¿No te habrás traído alguno?
Pues eso tiene que estar buenísimo. Buff...dices que untado con fiambres y patatas cocidas, y pongamos por ejemplo, con una buena compañía, en un crudo y desagradable día de otoño o invierno...
Rico, rico.
;-)
jejeje, cómo sabéis las cosas buenas que hay en la vida!! Pues sí, lo mejor es probarlo. Así que todos a París! En Boulevards Italiens -creo que se escribía así- podréis encontrar el sitio de fondues donde tomamos la raclette. A ver si encontramos un sitio en Madrid...
Publicar un comentario